Menu

¿POR QUÉ CAMBIA TODO CUANDO TE CASAS?

Cuando somos novios, hay aspectos de tu pareja o situaciones en la relación que no te gustan, y que adviertes pero que (consciente o inconscientemente) no quieres ver realmente porque piensas que «son detallitos» que podrían cambiar y, la verdad, es que generalmente los temas que en el noviazgo te causan algún conflicto o representan un reto, en el matrimonio se hacen más grandes o complicados; estaban ahí, pero no quisiste aceptarlos.

NO ES QUE LAS COSAS CAMBIEN, ES QUE NO LA QUISISTE VER

Tú, tu novio o esposo y yo, todos tenemos virtudes y defectos y todos éstos están ahí siempre. Sin embargo, en el noviazgo aunque vemos los aspectos negativos que tiene nuestra pareja, comúnmente escogemos enfocarnos en lo positivo, porque estamos enamoradas, porque no nos vemos todos los días o todo el día y porque no tenemos (todavía) que vivir con esos aspectos, de modo que es muy sencillo y práctico dejarlos pasar. Pero no nos confundamos, tanto lo bueno como lo malo de cada persona está siempre presente, es cuestión de enfoque y éste, en el noviazgo, es la mayoría del tiempo lo bueno- tanto de tu novio(a) como lo tuyo; tú probablemente tratas (aún sin quererlo) de resaltar tus cualidades y minimizar tus «defectillos», pues quieres agradar a tu pareja.

Y cuando te casas, por obvias razones, la convivencia diaria y continua provocan que «el lado malo» de tu pareja (que antes dejaste pasar) resalte más, los aspectos que no te encanta de él/ella son más notorios y te empiezas a preguntar ¿por qué cambió tanto mi hombre/mujer después de que nos casamos?, cuando realidad lo que sucede es que ahora pasas más tiempo con él o ella; es simple lógica que si estás más tiempo con una persona notes más sus buenos y malos rasgos, por un lado los que ya conocías y por otro los que nunca viste porque necesitabas vivir en pareja para que te tocara darte cuenta de ellos- aquí vienen los ejemplos típicos: no te gusta que deje los calcetines tirados, que sea extremadamente ordenado cuando tú no lo eres tanto, que no cierre la puerta del baño, que ella quiera dormir todas las noches con la tv prendida, etcétera. Estos son los «pequeños grandes» detalles que pueden fortalecer o debilitar un matrimonio, según los dejen.

OTRAS COSAS SÍ CAMBIAN

Por el otro lado, sí hay cosas que cambian, y esto es, pienso yo, por la propia naturaleza de las personas, de las relaciones humanas y del transcurso del tiempo. Se trata de un cambio, no puedo decir que no haya excepciones, pero casi siempre para bien; depende solamente de los esposos.

Para explicarme mejor, te pongo de ejemplo lo que pasaste o tal vez estás pasando, en los primeros meses de noviazgo. Al principio te sientes súper emocionada(o), nerviosa(o), buscas agradarle a tu novia(o), y conforme van pasando los meses -que aproximadamente son entre seis y ocho y que se les llama la etapa del enamoramiento-, esas sensaciones van cambiando y entonces ya no sientes las mismas y maravillosas “mariposas en el estómago” con cada beso; ahora cada beso es más profundo, más sincero, hay una nueva y más fuerte conexión, hay más confianza y más seguridad, se van los nervios y llega la tranquilidad.

Lo mismo sucede en el matrimonio. Casarse es probablemente la decisión y experiencia más importante de tu vida, y es súperrr emocionante, las mariposas de principio del noviazgo vuelven más fuertes, ¡especialmente en nuestra cultura latina con todo el show que nos encanta! Entre comprometerse y el anillo, la tradicional pedida en casa de la novia, el montón de despedidas con compañeras de trabajo, familiares, amigas, tal vez algún viaje de despedida, el ritual de ir a escoger el vestido, hasta que llega el esperado día de la boda, seguimos a la torna y continúa la emoción a la luna de miel, y aun cuando regresas a tu casa, son divertidísimas esas primeras semanas de arreglar entre los dos su nuevo hogar y empezar a acostumbrarse a vivir juntos… y entonces… esa emoción se acaba, y las mariposas, nuevamente se van.

Y viene algo mucho más fuerte, más maduro, viene la plenitud de tu nueva vida de pareja y, si te casaste por las razones correctas, te fascina. Entras a una nueva aventura en la que vas a construir con tu esposo(a) un proyecto, una familia, un patrimonio, ¡una vida entera! Es lógicamente diferente, y es MUY emocionante.

comunicacióndepareja

Por eso, es tan importante que mientras nos ocupamos de planear la boda, no descuidemos la preparación del matrimonio.

La boda dura una noche, unos meses si incluimos los preparativos. El matrimonio es para toda la vida.

Y las cosas claro que van a cambiar. Porque las personas cambiamos conforme el tiempo pasa y vivimos distintas experiencias personales, espirituales, profesionales, familiares y de pareja, y por ende, los cambios particulares de la mujer y el hombre se reflejan en su relación como esposos; ambos maduran y el amor se fortalece, sobre todo, porque los dos nos tenemos el uno al otro para empujarnos a ser mejores, todos los días, como personas y como pareja.

Al final, lo importante es tener siempre presente que el éxito en el matrimonio no simplemente sucede, hay que construirlo.

Formemos entonces matrimonios y familias más fuertes, depende de nosotros. Ahora, me encantaría saber qué piensas, déjame tus comentarios.

Con cariño,

– Marcia


Publicaciones recientes


LO QUE NADIE TE DICE SOBRE LA MATERNIDAD Y LOS 30´S

La sociedad es cruel, y si te desahogas suena a que te la pasas quejándote, y no hay que ser ...
Leer Más

PRÁCTICAS SENCILLAS DE AMOR PROPIO.

¡Holaa amigas las saludo con emoción en esta nueva semana! Hoy quiero platicarles algunos secretitos de cómo me consiento para ...
Leer Más

La perspectiva que cambiará cómo ves todo.

No he encontrado hasta hoy un truco mental más poderoso que éste para vivir una vida optimista, tener una actitud ...
Leer Más

¿QUÉ ES ESO DE LA IGUALDAD DE GÉNERO?

Principalmente por cuestiones de trabajo, me fui metiendo en el tema de la igualdad de género y los derechos humanos ...
Leer Más